Publicidad y cultura de marca

China experimentó una serie de reformas económicas para alejarse del comunismo y acercarse al capitalismo tras el fin de la Revolución Cultural (1966–76), un movimiento sociopolítico dirigido por el presidente del Partido Comunista Chino, Mao Zedong, que pretendía modernizar China mediante la destrucción y supresión de la tradición. Nike, Coca-Cola y muchas otras marcas estadounidenses comenzaron a vender sus productos por primera vez en la China moderna en la década de 1980. A medida que se relajaban las regulaciones comerciales, los productos extranjeros se importaban cada vez más en el país, dando lugar a una nueva época de consumismo y cultura de marca.

Estos cambios radicales inspiraron a muchos artistas jóvenes del momento, que vieron lo rápido que cambiaba la China que conocían. El Pop político, caracterizado por la combinación de imágenes publicitarias, la estética del arte pop y referencias al arte propagandístico chino, surgió en este periodo, reconociendo las semejanzas entre la idolatría política y el culto a las marcas. El consumismo capitalista, que ya no es un tema nuevo en el arte contemporáneo chino, hoy puede considerarse a través de la lente de su impacto duradero en la cultura y la vida cotidiana chinas.