El cine en sus inicios era, desde luego, una forma de creación increíble, pero también era un instrumento de propaganda. Se definió a partir de la supremacía blanca. La historia del cine y de las películas está profundamente ligada a la historia de la expansión colonial de Europa. Surgió en el momento en que era muy importante para Europa establecer su supremacía y mostrarla con imágenes y películas. Además, en el imaginario colectivo de los europeos estaba presente esa sensación de superioridad sobre los demás continentes. Así que fue muy natural que las personas que produjeron las primeras imágenes del cine mostraran el mundo de la forma en que lo concebían. Muchas de las primeras imágenes de las películas pretendían, aunque no fuera conscientemente, contribuir a la propaganda de Europa, la propaganda colonial, de ser el centro del mundo y de ser el único continente capaz de ver a los demás como inferiores.