Piedras portuguesas #2, 2017

Los “tapetes de mala acogida” de Jaime Lauriano se refieren a los lugares africanos desde los que se envió el mayor número de personas esclavizadas a Brasil: la Costa de Oro (conocida en portugués como Costa da Mina), Angola y Mozambique. El título de la obra hace referencia tanto al medio como a las inequidades que la colonización portuguesa “grabó en piedra” en Brasil mediante la explotación de la mano de obra esclava africana. Aunque Brasil declaró su independencia de Portugal en 1822, la trata transatlántica de esclavos persistió en el país por sesenta años más. La esclavitud en Brasil no se abolió formalmente hasta 1888.