Yoo Youngkuk era conocido por sus coloridas obras abstractas con formas geométricas, influidas por el neoplasticismo y el constructivismo ruso. Durante la guerra, Yoo pudo quedarse en su ciudad natal, lo que le permitió perfeccionar la estructura interna de sus pinturas abstractas. Para esta obra, llenó el lienzo con colores intensos, superponiendo la pintura para crear una superficie gruesa y dura, lo que dio lugar a una textura que también se encuentra en el Art informel (expresionismo europeo).