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Anónimo
San Miguel vencedor del demonio y defensor de la Inmaculada Concepción, ca. 1760
San Miguel, vestido con una coraza romana tachonada de estrellas, esgrime en la mano derecha una espada flameante y una llave, símbolo de la Iglesia. Con la izquierda sostiene una cadena y un cáliz de oro con la hostia para someter a la bestia en la que aparecen inscritos los siete pecados capitales. Entretanto, la Mujer del Apocalipsis (identificada con la Inmaculada Concepción) escapa al cielo.