Yo y mi mismo, late 1880s
En 1869, William H. Mumler, fotógrafo de Boston, fue llevado a los tribunales por retratar lo que, según él, eran espíritus de los muertos. Pero unos años más tarde, los estadounidenses ya no se sorprendían ni se desconcertaban ante tales experimentos con la verdad fotográfica. Un engaño muy popular consistía en fotografiar a una persona varias veces en el mismo escenario.